La descripción formal de la ropa de trabajo es la de un atuendo que visten los miembros de una organización durante las actividades de esta. Dependiendo del tipo de industria, el número de trabajadores y el país también se le puede llamar vestuario, uniformes personalizados o ropa de trabajo personalizada. Para algunos, su concepto puede tener una connotación ‘oficial’, ‘seria’ o ‘burocrática’. Sin embargo, son versátiles y se pueden adaptar a cualquier necesidad.
La implementación de uniformes personalizados, como todo en la vida, tiene ventajas y desventajas. Algunas personas los consideran profesionales, mientras que otros piensan que limitan la libertad de expresión.
Al final, la decisión de aplicarlo o no depende de cada empresa.
¿NECESITO UNIFORMES PERSONALIZADOS PARA MI NEGOCIO?
Para algunos negocios la prenda laboral es una pieza esencial en el día a día, mientras que para otros no. De hecho, varios de ellos lo ven como algo negativo. Todo depende de tu modelo de negocio, pero si tu compañía está dentro de alguna de las siguientes categorías, entonces probablemente necesites al menos un uniforme estándar.
Entrega o servicios a domicilio
Si tus trabajadores van al hogar de tus clientes, deberían llevar algún tipo de uniforme. Para que las personas sientan la confianza para dejar entrar a alguien a su casa, es muy importante que vean algo que les garantice que quien esta detrás de su puerta es un profesional, y no un ladrón. Seguramente una calificación certificada también es una solución, pero un uniforme identificará inmediatamente a esta persona.
Sector sanitario
La indumentaria laboral en la industria sanitaria garantiza higiene para el paciente y comodidad para el trabajador. Estos suelen tener un código de color, el cual permite la organización del área y la simplificación del proceso de identificación durante una emergencia.
Los códigos cambian según donde estés ubicado. No obstante, la mayoría del tiempo los cirujanos usan uniformes de color verde en clínicas y hospitales. Otro tipo de industrias que no necesariamente están relacionadas con la salud pero requieren de una alta exigencia sanitaria son los spas y gimnasios, e igualmente se benefician al tener camisas polo personalizadas.
La industria de la comida
Aunque en el mundo de la gastronomía hoy en día se ven uniformes personalizados de todos los tipos y colores, el atuendo de color blanco, junto con su delantal, siempre será el clásico de este mundo.
Este color le asegura al cliente que tanto el cocinero como el restaurante están pulcros. Las prendas blancas también absorben menos calor que el resto de los colores, lo que mantiene al personal fresco y cómodo.
Servicio al cliente: presencial
Si tienes una tienda u otro tipo de espacio donde tratas al cliente cara a cara, no te haría mal considerar un uniforme, por ejemplo un polo bordado. Esto permitirá que tus clientes identifiquen rápidamente a tus empleados, garantizando un servicio mas rápido.
Labor manual / Industria de la construcción
Mas allá de crear una marca, este tipo de negocios se benefician de uniformes personalizados por razones de seguridad, como por ejemplo un chaleco de alta visibilidad. El portar una vestimenta apropiada le proporciona a los empleados las herramientas necesarias para cumplir con su trabajo y reducir el riesgo de lesión.
Aunque tu marca no entre en ninguna de las categorías mencionadas, un uniforme puede tener también un impacto positivo en tu compañía.
LOS BENEFICIOS DE TENER UNIFORMES PERSONALIZADOS
Igualdad
Este tipo de indumentaria coloca a las personas que lo utilizan en un mismo nivel. Por ejemplo, en los colegios evita que los niños se sientan superiores o inferiores a compañeros de un distinto estrato social.
De igual manera, el hecho de usar lo mismo impide el uso de vestuarios que distraigan o resulten ser ofensivos. Esto podría ser una camiseta con un eslogan controversial, por ejemplo.
Branding
El vestuario corporativo permite dar a conocer tu compañía. Lo único que debes hacer es que uno de tus trabajadores use una camiseta con el logo estampado y automáticamente se convertirá en un anuncio. Las prendas personalizadas actúan como una extensión de tu marca.
Crea una imagen profesional
Al igual que tener una página web y una buena tarjeta de presentación, un personal uniformado le da un toque de profesionalidad a tu empresa. Los clientes no solo verán tu negocio con seriedad, sino que los trabajadores pensarán lo mismo.
Los estudios han demostrado que los empleados cambian su actitud e incluso la forma de pensar cuando hacen sus labores con ‘ropa de trabajo’. Esto no significa que una persona que se vista casualmente no se tome su trabajo en serio, únicamente indica que el llevar un uniforme hace que el cerebro diferencie con más facilidad el estado de ‘trabajo’ y ‘no trabajo’.
Creación de equipos
Cuando los empleados llevan el mismo tipo de ropa, sienten que son parte de un equipo. Se genera un sentimiento de “pertenencia” y orgullo por la compañía en la que trabajan.
Seguridad
Algunas personas no se dan cuenta que el vestir uniformes personalizados incrementa la seguridad en grupos grandes de personas. Cuando todo el mundo se viste con un estilo parecido, es más fácil distinguir cuando un extraño se cuela.
Ahorro de tiempo
La ropa de trabajo personalizada puede llegar a ahorrar más tiempo del que te imaginas. Primero, significa que los trabajadores no van a pasar tiempo decidiendo que van a ponerse. Segundo, al tener uniforme no se necesita un protocolo de vestido que quita tiempo al crearlo y al implantarlo.
¿CÓMO DISEÑAR LOS UNIFORMES PERSONALIZADOS DE MI NEGOCIO?
Veo que has leído todo (¡qué bien!) y has decidido que tu compañía se beneficiará de portar uniformes, así que el siguiente paso es diseñarlos. Pero no te preocupes, no necesitas tener un título en diseño de moda o habilidad para dibujar para lograr un atuendo laboral apropiado. Pero antes de sentarte con un bolígrafo y una hoja, necesitarás hacerte un par de preguntas.
PARTE 1 – Investigación
¿Qué hace que mi marca resalte?
No hay necesidad de escribir un ensayo, simplemente haz un listado de palabras clave. Entre 5 y 10 será suficiente. Pero, ¡cuidado!, con muy pocas correrás el riesgo de que te falte material. Si pones demasiadas, verás cómo se complica el proceso.
¿Cuáles son las fortalezas de mi marca?
De nuevo, haz otra lista de palabras, pero en este caso haciendo referencia a tus fortalezas. Si algunas coinciden con el listado anterior, no te preocupes, no hay ningún problema.
¿Cómo perciben mi marca?
Crea una encuesta para tus clientes y pregunta a tus amigos y familiares. A veces creemos saber como el resto nos ve, pero las respuestas a estas preguntas pueden llegar a sorprendernos. Una perspectiva objetiva de una tercera persona puede aclararte como perciben tu marca desde fuera.
¿Cuál es mi historia?
Hoy en día, el contar historias es un deber para los que hacen marketing. Mas allá de las ventas, las marcas contemporáneas envuelven a sus clientes de forma emocional. Piensa en qué personalidad tiene tu compañía y qué quiere transmitir. Un uniforme que tenga coherencia con tu narrativa te va a ayudar a guiar el concepto de lo quée es tu empresa.
¿Comprendo los diferentes tipos de uniformes?
¿Ejecutivo casual? ¿Ejecutivo formal? O ¿solo casual? Tu target, el servicio que ofreces y el área en el que trabajan tus empleados te dará una pista sobre qué tipo de prenda laboral debes implementar. Un polo bordado puede que no sea tan formal como un traje, pero puede reflejar mas seriedad y profesionalismo que una camiseta impresa.
PARTE 2 – Diseño
Inspírate
Después de haber respondido a las preguntas anteriores, ya debes tener una buena comprensión de lo que es tu marca y como quieres representarla. Antes de plasmar tus ideas sobre papel, sería bueno que navegaras un poco en internet.
Mira referentes de lo que otros han hecho. Vas a encontrar una colección bastante amplia de uniformes personalizados de trabajo. Observa y analiza. No querrás gastar dinero y tiempo en una producción que ya existe. Si quieres ver mas ejemplos, visita Pinterest, busca ‘uniforme’ y verás todas las opciones que aparecen.
Piensa en algo atemporal
Siempre llega un momento donde todos debemos reinventarnos y de no ser por los cambios de temporada, lo haríamos cuando más nos convenga. Se sabe que una vez tengas un uniforme vas a tener que renovarlo con cierta constancia, pero ten presente que si lo haces muy seguido correrás el riesgo de no reflejar una imagen coherente. Esto lo puedes evitar alejándote de las tendencias.
El color Fiesta Red podría ser una gran idea en este momento, pero en un par de años te verás como una piñata. Lo mejor es que te adhieras a un concepto atemporal, así tu uniforme tiene mas probabilidades de ser relevante por más tiempo. Y si alguien se atreve a llamarte ‘aburrido’ recuérdales que optas por un estilo mas ‘clásico’.
Piensa en los colores
Puedes estar pensando que este paso no es necesario, pues ya tienes los colores corporativos seleccionados. Pero reitero, piensa y analiza, porque una paleta que funciona bien en un logo no funciona necesariamente en ropa.
Para estos casos es aconsejable hacer una muestra (más adelante les hablaré de esto). Si dado el caso, decides no utilizar tu paleta corporativa, entonces recomiendo que vayas por colores complementarios. Busca un balance entre neutros y brillantes.
Una herramienta que puede ser de gran ayuda en esta labor es Adobe Color CC. Es gratis y te da la posibilidad de navegar entre miles de paletas pre elaboradas o crear la tuya basada en tonos específicos.
Piensa en los materiales
Una prenda elaborada con una fibra sintética puede llegar a ser mas económica. Sin embargo, no respira muy bien y no es tan cómoda como una fibra natural. Si tus empleados están en actividad continua, un camarero por ejemplo, sería aconsejable utilizar materiales más “amigables” para garantizarles comodidad y movimiento.
Si tu negocio se encuentra al aire libre, entonces podrías ir por fibras que los protejan contra los elementos del exterior. Los tejidos de alta calidad normalmente son sinónimo de mayor importe, pero míralo como una inversión, ya que te duraran más tiempo que un tejido de bajo coste.
Piensa en tus empleados
¿Qué crees que les gustaría usar? Como ellos son quienes van a pasar un buen tiempo con él, sería una gran idea conocer su opinión sobre el tema. Pocas cosas son peores que llevar un uniforme que no es agradable (vale, está bien, hay un montón de cosas mucho peores que esto, pero ya sabes a lo que me refiero).
Hora de diseñar
Habiendo reunido toda la información, es hora de plasmar tus ideas sobre el papel. Puedes hacerlo a mano o en tu ordenador. Si no tienes esta habilidad, puedes pedirle ayuda a algún amigo del medio artístico.
También puedes hacerlo mediante un collage o, en el peor de los casos, busca una imagen de algo parecido que quieras. Señalar e imaginar siempre funciona. ‘Quiero algo como esto, pero en vez de amarillo lo quiero azul.’
PARTE 3 – Producción
Busca una impresora
Una parte muy importante del proceso de producción es encontrar una compañía que sepa elaborar tu diseño con el detalle y atención necesaria. Por supuesto, nos encantaría que nos escogieras. O sea, ¿qué motivo hay para no hacerlo? Pero bueno, si no lo haces, no tenemos nada en tu contra. Probablemente te daríamos una sonrisa un poco arrogante cuando volvieras, pero eso sería todo.
Consejo profesional: ¡Pregunta a tus proveedores si les gustaría patrocinar tus uniformes!
Crea una muestra
Antes de comprometerte cien por cien con tu diseño, es muy importante hacer una muestra. Algo así como un prototipo. Esto te va a permitir ver como va a quedar. Puedes pedir a uno o dos de tus trabajadores que usen los uniformes de muestra un par de días y luego solicitar el reporte.
¿Es cómodo? ¿Se ve bien después de varias horas de uso? ¿Cuál fue la reacción de los clientes? Porque créeme, no quieres pasar la misma experiencia de Virgin Airlines (enlace a artículo en inglés). Analiza la retroalimentación y haz los cambios necesarios. Si hay muchos, podría significar que debas rehacer tu diseño y sino, lo último que debes hacer es mandarlo a producir.
¡Por último, diviértete!
No necesitas ser un magnate en diseño para elaborar un buen uniforme que encaje a la perfección con tu negocio. Siempre recuerda lo que tu marca quiere contar. ¡Inspírate, diseña y diviértete! La indumentaria corporativa no solo es una forma de promocionar tu compañía, es una oportunidad para expresar tus ideas y dejar tu huella en el mundo.